martes, 29 de agosto de 2023

Reseña de la película: Mantícora (Carlos Vermut) - 2022 / España

 
 
“Mantícora” fue una de mis películas favoritas del 2022 (Top 10) en un año de oro para el cine español. Carlos Vermut sigue demostrando ser la voz más original y arriesgada del cine español, tras dos películas notables como Magical Girl y Quién te cantará, que transitaban por los trastornos mentales, los traumas, los conflictos familiares y las pesadillas. Con “Mantícora”… como decirlo… demoré en hacer esta reseña porque no sabía exactamente cómo hacerla. Porque aunque no me interesa saber o contar spoilers, en esta película sí me gustaría que el público se acercase sin saber muchos detalles del conflicto principal, para que quizás se lleve la sorpresa que yo mismo me llevé, aunque ya estuviese teniendo sospechas. Voy a tratar de encontrar un punto medio para no develar lo importante y dar un cuadro general de mi apreciación de esta nueva obra de Vermut.
 
 
 

 
 
La Mantícora es un monstruo mitológico con cabeza humana, cuerpo de león y cola de dragón, conocido desde su etimología por ser el “devorador de personas”. Desde el título se nos sugiere que vamos a ver un monstruo, pero la trama inicia mostrándonos a Julián, un joven entre los veinte años, quien se dedica a deseñar videojuegos y lleva una vida normal y solitaria. Julián conoce a Diana, una joven que parece tener los mismos gustos que él y hacen buena química, iniciando una amistad íntima que va fluyendo y avanzando lentamente, lo que da la sensación de estar presenciando una especie de comedia romántica. Pero ambos jóvenes tienen algunos problemas y tienen un secreto que los atormenta, especialmente el de uno de ellos. Julián un día ayuda a un pequeño vecino, quien debe pasar las tardes solo por los horarios de trabajo de la madre, lo que despertará un enorme cariño y agradecimiento por parte del menor, y en Julián, sentimientos que lo confrontan y lo cuestionan. Mientras Diana debe cuidar a su padre enfermo.
 
 
 

 
 
La película aborda muchos temas complejos y densos tanto a nivel social como psicológicos con la precisión, el detalle y la frialdad de un cirujano con un bisturí que va abriendo una herida profunda pero totalmente craneada e incisiva con el objetivo de perturbar al espectador y llevarlo a ponerse en distintos zapatos y en distintas situaciones, en donde deberá plantearse temas sobre su moral y su misma ética. Porque el tema central es muy tabú y no se le ha dado el espacio público para dialogar, reflexionar y tratar de entender a las personas que sufren de la misma condición de Julián, que al parecer son muchas, sobre todo las que viven una vida totalmente reprimida y jamás llegan a cumplir sus deseos y fantasías.
 
 
 

 
 
Por lo tanto, “Mantícora” es la historia de un monstruo, pero no uno normal, sino que es a la vez humano, animal, mito y tabú. La forma en que Vermut escribe el guión, para crear paralelismos con la mitología y temas psicológicas es realmente fascinante, porque además del diálogo, cada encuadre te da una referencia y una pista para identificar todo lo que el director está sugiriendo que veas y analices. La fotografía también es excelente, minimalista pero igual de precisa y fría, sin dejar de mencionar el excelente trabajo de los actores Nacho Sánchez (Julián) y Zoe Stein (Diana), ésta última también tiene un nombre con un significado para la trama relacionado con la mitología.
 
 
 

 
 
Una película valiente y brutal que pone sobre la mesa a través del arte (y un buen arte) un tema de preocupación social, además que también incluye el tema de la tecnología dentro de la ecuación y quizás con ello una opción o una solución a parte del problema. Y también hay una crítica a la misma sociedad acerca de su percepción acerca del tema y a las personas de igual condición que el protagonista, con un ejemplo práctico e inmersivo que vuelve a desafiar al espectador. Estoy de acuerdo en que es difícil recomendar una película así tan libremente, pero creo que todos necesitamos verla, problematizarla y hablar sobre ella, y que esto a la vez trascienda. La película estuvo nominada a los Goya 2022 a los premios a mejor dirección, guion, actor y actriz revelación y participó fuera de competición en el Festival de Sitges 2022.
 
 
 

 

Alejandro Salgado Baldovino (A.S.B)

 

jueves, 17 de agosto de 2023

Reseña de la película: Godland (Vanskabte Land) de Hlynur Palmason - 2022 / Dinamarca

 
 
“Godland” nos cuenta la historia de un joven sacerdote danés, Lucas, quien es encomendado por su superior para hacer un largo viaje hacia Islandia con el objetivo de construir una iglesia en el lugar indicado (una pequeña comunidad sobre las montañas) y tomar fotografías de las personas que encontrase a su paso. Lucas muy entusiasta y animado inicia la travesía con su cargado equipamiento y siempre llevando a sus espaldas el caballete, la cámara y todo el ensamblaje del daguerrotipo, que fue el primer procedimiento fotográfico de la historia. Curiosamente el formato de la película es de 4:3 como tenían las mismas imágenes del daguerrotipo de la época (durante todo el siglo XIX).
 
 
 

 
 
Pero el viaje de Lucas en poco tiempo (cuando baja del barco y le toca hacer el resto de recorrido a pie y a caballo) deja de ser una aventura idílica para convertirse en toda una pesadilla de sobrevivencia, en donde deberá enfrentar distintos embates de la naturaleza, del terreno desconocido y la desconfianza de algunos habitantes, lo que lo llevará al límite de su resistencia y a cambiar completamente, al sentir por primera vez la cercanía de la muerte y la ferocidad de la vida.
 
 
 

 
 
Cuando llega al pueblo arrastrado, abatido y ayudado por un local contratado, Lucas es bien recibido por una familia próspera y conservadora, quien lo acoge mientras lleva los trabajos de la construcción de la iglesia. Pero el patriarca anfitrión tiene dos hijas, y una de ellas llama la atención de este renovado Lucas, lo que lo lleva a experimentar sensaciones que no había tenido hasta ese momento y que le traerán muchos problemas.
 
 
 

 
 
La película se podría dividir en dos partes, en donde en la primera tenemos ese viaje salvaje de Lucas por la geografía islandesa, a través del hielo, de volcanes activos y angostos parajes que bordean y atraviesan las empinadas montañas, en donde su alma de pone a prueba y es transformada. En esta parte, así como en toda la película tenemos una exquisita fotografía, a pesar del formato que corta la inmensidad del cuadro, una gran dirección y trabajo de sonido, que dejan entrever los posibles riesgos que hubo en la producción y en el rodaje. Y en su segunda parte, en donde tenemos al transformado Lucas enfrentado contra su propia naturaleza renovada y recién descubierta, con el despertar de sus pasiones, su hostilidad y sus dudas.
 
 
 

 
 
Hlynur Palmason es un ya reconocido director islandés con una estética reconocible como en su anterior película “A White, White Day” (2019), en donde los personajes también se enfrentan a sí mismos y al paisaje islandés, y con esta película se supera y logra su mejor trabajo hasta el momento. La película estuvo en competencia en la Sección oficial de largometrajes (Un Certain Regard) en el Festival de Cannes y como dato curioso, la inspiración del director, quien también es el guionista, para la película fueron una serie de siete fotografías o daguerrotipos encontradas del paisaje islandés de antaño tomadas por un sacerdote danés de la época.
 
 
 

Reseña de la película: Godland (Vanskabte Land)

 

Me pareció una película estupenda, poética, dura, compleja y muy bien estructurada, que nos retrata de forma visceral y física el viaje y el enfrentamiento de un hombre contra la naturaleza exterior y contra su propia naturaleza. La actuación del actor Elliott Crosset Hove (Lucas) y la de Ingvar Eggert Sigurdsson, guía de Lucas y actor fetiche del director son realmente destacables y se acoplan de forma perfecta con la dualidad del paisaje, tan bello pero tan frío y hostil. Muy recomendada. De las joyas del 2022, y en cartelera de cine en España. 


Tráiler de Godland
 

 

Alejandro Salgado Baldovino (A.S.B)

 

viernes, 4 de agosto de 2023

Reseña del libro: Bibliotecas ajenas (Javier Vargas de Luna)

 
 
“Bibliotecas ajenas” es el libro más reciente del escritor, poeta y docente mexicano, Javier Vargas de Luna, quien se ha dedicado durante varios años a recorrer Hispanoamérica en búsqueda de lectores con la esperanza de acceder a ese espacio íntimo y místico, como es la biblioteca personal de cada lector. Pero aunque ese sea el objetivo principal, cada aventura del autor (o arqueólogo literario) conlleva todo un proceso que involucra a la ciudad visitada, la gente, la comida y muchos más aspectos diversos que sirven de fiel reflejo de ese vasto mundo de la literatura.  

A través de trece capítulos, que son a la vez trece ciudades, trece libros (y alguno que otro más) y trece personas elegidas (junto a las fallidas), el autor nos sumerge en trece ensayos muy originales y particulares, los cuales a la vez navegan entre distintos géneros como la crónica y el diario de viajes, en donde vamos descubriendo de forma gradual aspectos muy interesantes del espíritu y la esencia de la ciudad, de su entorno social y político, de su población, de su cultura y del libro como objeto de valor que persiste al paso del tiempo.  

Desde ciudad de México, pasando por Granada (Nicaragua), Salta (Argentina), La Habana (Cuba), Cartagena (Colombia), La Paz (Bolivia), Madrid (España) y hasta Santo Domingo, Chile, Panamá y Perú, Javier nos introduce en los recovecos y los espacios de luz de los lectores de a pie, quienes ostentan profesiones tan alejadas de la literatura, como gestores turísticos, geólogos, administradores, artesanos, joyeros, psicólogos, taxistas, hasta los más afines como los libreros o la simple presencia física de la estantería de una librería.

Yo fui la persona seleccionada del capítulo de Cartagena, que se llama “Un café en Costaguana”, en donde Javier describe su travesía recorriendo las calles de la ciudad amurallada en medio del calor y la humedad, y relata cómo después de varios intentos fallidos de convencer a una joyera de que le mostrase su biblioteca llegó como arrastrado por el destino a la Librería Ábaco, en donde le dieron la información de un Club de Lectura que se reunía todos los miércoles a las 6 p.m., y de allí Javier contactó conmigo y el grupo, en donde preciso nos encontrábamos leyendo “Nostromo” de Joseph Conrad, tras haber leído la “Historia secreta de Costaguana” de Juan Gabriel Vásquez. El capítulo es muy bueno, agradable, cálido y lleno de humor, en donde Javier hace su radiografía de la ciudad, su gente, los lectores y su cultura, a la vez que se explaya sobre un texto y un autor particular, normalmente inspirado en las bibliotecas que visita. Y esa es la otra parte que tienen todos los ensayos, una muestra de su pasión y erudición lectora, al ahondar y hacer relaciones entre una obra literaria y la ciudad visitada, logrando con ello un ensayo dentro del mismo ensayo, que a la vez transita entre la reseña, el repaso bibliográfico/biográfico y la crítica literaria. 

“En suma, levantar el telón de nuestra biblioteca es un acto de generosidad tanto como una intromisión, es darle literalidad – y también literariedad- a la vida de nuestras obsesiones y aun a la de nuestros posibles fracasos.
En fin, mostrar los colores de nuestros entrepaños es una reivindicación escritural, es el desnudamiento verbal de lo que somos, índices y sorpresas, atavismos y prólogos, aspiraciones con pie de página…”

Así lo describe el mismo Javier, y entiendo perfectamente esa sensación porque recuerdo que también dudé un poco antes de aceptar mostrarle mi biblioteca personal a un recién conocido. Pero recuerdo también sentir curiosidad por ese viajero que iba con una pequeña libreta en la mano tomando notas, incluso en pleno mercado de Bazurto. Por lo tanto, acercarnos a este libro me parece que es también una aproximación a un agudo ejercicio de observación y curiosidad, sobre las ciudades, sobre los lectores, sobre los libros, y a la vez, sobre la vida y la humanidad.  

Tengo otros temas interesantes que mencionar sobre este libro y preguntas al autor, por lo tanto estaremos presentando el libro en la Librería Remedios La Bella, en el Claustro de la Merced (junto al Teatro Adolfo Mejía)en Cartagena de Indias, el próximo Miércoles 09 de Agosto a las 5:00 p.m. quedan invitados:
 
 
 

Reseña del libro: Bibliotecas ajenas

 

 

Alejandro Salgado Baldovino (A.S.B)