Hace poco fui a ver Madagascar 3: de marcha por Europa, y la verdad he pasado un rato bastante entretenido. Tenía un poco de desconfianza porque recientemente me había dormido viendo la última parte de la Era de Hielo, pero en esta obtuve todo lo que espero de un filme de este tipo, entretenerme a lo grande.
Luego de la primera parte, en donde conocimos todos los memorables personajes del zoológico, pasando por la segunda, un poco más floja, llega esta tercera parte, en donde nuestros amigos al fin regresarán a casa, a Nueva York nuevamente. Y observan que la mejor forma de conseguirlo es infiltrándose en un circo en caída, que con ayuda de un buen representante llevará el circo a muchas ciudades del mundo. Los amigos citadinos lo harán sin saber que dentro del circo (que ayudarán a innovar), encontrarán su verdadera pasión, muy lejos de las jaulas y la inercia del zoológico.
Como siempre los personajes secundarios, los pingüinos como siempre graciosos, el rey de Madagascar, y en esta ocasión una villana que recuerda a Cruela de Vil. Todos cumples en cierta medida su papel.
Pero lo que más me ha gustado del filme, sin duda es el tratamiento al tema del circo, sobre todo porque no hace mucho tiempo escribí un artículo con un comentario al respecto.
Desde una perspectiva, es curioso ver a los mismos animales incentivando a los animales de circo a que cambien de rutina, que renueven el circo. Curiosamente los nuevos actos que montan, llevado a la realidad, son actos que se ven en espectáculos artísticos hechos por personas. ¿Un guiño al circo del sol y a los nuevos circos que utilizan sólo a personas?, yo creo que sí, y como lo manifesté en mi artículo, apoyo totalmente esta idea.
Y otro momento dramático, cuando los animales se dan cuenta de que no quieren regresar a su cómoda vida en el zoológico, sino que después de vivir tantas aventuras, aprendieron el verdadero significado de la vida, y luego de ayudar a resurgir un circo alabado en viejos tiempos. Detalles como estos me gustaron, y todo esto acompañado de las bromas normales, la animación, la ambientación, las situaciones exageradas y las payasadas de los distintos protagonistas, me dejaron con un muy buen sabor.
Una película entretenida para disfrutar.
6/10
Comparto mi artículo: "De Circos y Espectáculos"
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