Steven
Soderbergh, el director que sorprendió en el año de 1989 con su ópera prima “Sexo,
mentiras y cintas de vídeo”, ganando la Palma de Oro en el Festival de Cannes, y
que luego tuvo una cosecha de filmes bastante irregulares, parecía haberse
recuperado un poco en los últimos años, sobre todo en este 2013, cuando
presentó “Efectos Secundarios”, uno de los filmes más interesantes del
director, que ya venía desde el 2011 tratando temas sociales, políticos y de
magnitud global con “Contagio”. Este 2013, ha vuelto a atacar, esta vez con una
película para HBO, un biopic sobre la gran estrella estadounidense Liberace. El
director ha anunciado que este sería su último trabajo como director, nosotros
esperamos que sea al menos un periodo de descanso, porque sin dudas con sus
últimos filmes ha demostrado que aún tiene mucho por dar, además de que es muy
joven aún.
“Behind
the Candelabra”, a pesar de ser una película de HBO, que se estrenó en el canal
antes de las salas de cine, fue seleccionada para competir en la selección
oficial del Festival de Cannes 2013, donde tuvo muy buena acogida. Esta película,
la que podría ser la última del director, es un filme basado en el libro del
mismo nombre, escrito por Scott Thorson, el personaje real interpretado por
Matt Damon, quien fue amante de Liberace por un largo tiempo. En el filme,
claramente todo se observa desde la perspectiva de Scott, desde que este fue
presentando al famoso pianista, que al parecer tenía amigos que le conseguían jóvenes,
hasta cuando este se convierte en su pareja secreta, “detrás del candelabro”,
que hace alusión al famoso objeto que Liberace colocaba sobre su piano en todas
sus presentaciones.
El filme,
en términos generales me ha gustado. Creo que Soderbergh refleja muy bien el
estilo de vida excesivo, materialista y extravagante del showman
norteamericano, que dio un nuevo significado al estatus de superestrella e
icono pop.
Además
de la extravagancia y el espectáculo, en el que el director se mueve muy bien,
los más destacado del filme, es quizás el acercamiento intimista a los
personajes, detrás de escena, detrás del piano y el candelabro, como estos
personajes vivían en la banalidad pero también tenían sufrimientos y grandes
vacíos. Y precisamente esta parte sale reforzada, gracias a las excelentes
actuaciones de Michael Douglas como Liberace, un papel totalmente diferente a
todo lo que ha hecho el gran actor y Matt Damon, un actor que a veces me
molesta, pero que en esta oportunidad hace un trabajo destacable al lado de
Douglas, interpretando a Scott.
Me
parece un acercamiento honesto a la vida de un artista famoso, que como muchos
de la época y aún hoy en día, ocultan su homosexualidad para no perder el apoyo
y el cariño del público. Aunque sea desde la perspectiva de Scott, del que
también podemos observar sus dificultades, excesos y sus ausencias, el
personaje de Liberace está muy bien dibujado y su descripción es tan íntima,
que sólo pudo ser contada por alguien que lo conoció y al parece también lo
amó.
En síntesis,
no creo que sea una obra maestra pero es un filme muy interesante y bien
rodado, que posee ritmo, no tiene grandes pretensiones y que se dedica a
mostrar y escarbar dentro de la vida de este personaje tan famoso, como lo fue
Liberace y su relación con Scott, de entre las tantas que tuvo, su talento con
el piano y el público, y su lamentable final a inicios del año de 1987, cuando
tenía 67 años. Creo que su mayor virtud, son las interpretaciones de los
actores, que sólo por ello merece la pena verla y el tratamiento de la
historia. Por todo esto:
7/10
Frases de la película
Me encanta Douglas en el papel de este señor seductor y de Damon como el joven seducido, sin duda una de las peliculas de estreno que más me impactó este año, además ganadora de muchos premios.
ResponderEliminarAsí es. Ambos haces excelentes trabajos! Saludos y gracias por pasarte.
EliminarA.S.B