“Volver
a Nacer” o “Venuto al mondo”, es el cuarto largometraje del director Sergio
Castellitto. Castellitto es esposo de la escritora Margaret Mazzantini, con
quien inició a cooperar desde su ópera prima en 1999, en los guiones y
solamente una vez como miembro del reparto.
Yo tengo
una historia personal con esta historia, en especial con el libro. En el año
2009 Margaret Mazzantini publicó su tercera novela que tituló: “Venuto al mondo”,
en Latinoamérica nos llegó como “La palabra más hermosa”. Recuerdo que compré
el libro en el 2010 porque me llamó mucho la atención la sinopsis, y fue una de
mis lecturas favoritas de ese año. En el 2011 me enteré que iban a hacer una
adaptación al cine con Penélope Cruz, Emile Hirsch y dirigida por Castellitto. Me
alegré mucho en el momento porque no esperaba a ver en imágenes esa historia
tan dura y hermosa que tanto me había gustado.
Finalmente
pude verla este 2013 y he tenido emociones encontradas. Pero antes de hablar
del filme y su comparación con el libro, les diré que cuenta la historia de
Gemma, una mujer que decide volver a Sarajevo con su hijo adolescente Pietro. En
ese viaje Gemma se reencuentra con su viejo amigo Gojko, un poeto bosnio con el
que 16 años atrás conoció a Diego, un fotógrafo americano y el amor de su vida.
Gemma en ese viaje recuerda todos esos momentos que vivió años atrás,
apasionantes, alegres y dolorosos, que la enfrentarán a unos nuevos en la misma
ciudad de Sarajevo.
La historia
de Mazzantini es hermosa y dura, escrita en primera persona con una prosa tan
precisa y poética que hipnotiza. Narra con agilidad y fascinación los tormentos
y lo cotidiano. El libro tiene descripciones tan preciosas, que extrañé esas
reflexiones de Gemma, hubiese sido genial que el director incluyera varias con
la ayuda de la voz en off, en lugar de agregar diálogos muchas veces torpes y
sin sentido que estropean la cadencia de la historia.
Es bastante
fiel al libro en la estructura de la historia, pero es absolutamente
traicionado en su esencia.
En cuanto
a los actores, ocurre algo extraño pero muy común. Hirsch y Cruz,
individualmente tienen buenos momentos, pero como pareja no tienen muchas química.
Y vaya que la pareja protagonista debía de ser un acierto. Quizás Cruz es la
que más sobresale, pero Diego debió ser diferente, sin desestimar el talento de
Emile Hirsch.
En síntesis,
es un filme apoyado de una bella historia, pero que lamentablemente el filme no
le hace mucha justicia al libro. Por lo que recomendaría a los que no les ha
gustado mucho el filme que se acerquen al libro, que es una historia sobre el
amor, la guerra, los secretos del pasado y el perdón.
4/10
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