“Colorful”
es una película de animación japonesa de Keiichi Hara del 2010. Es una película
hermosa. Una oda a la vida y a la superación.
La
película inicia en un lugar bastante extraño, cuando un alma se encuentra en
una especie de “purgatorio” o estado transitorio, en donde un pequeño niño le
informa que se le ha dado una nueva oportunidad para regresar a la tierra. El
alma en pena acepta y regresa precisamente al cuerpo de un joven de 14 años que
se había intentado suicidar. Así que el alma debe cargar con ese nuevo cuerpo y
enfrentar todos los problemas que lo llevaron a cometer el suicidio e iniciar
una nueva vida.
Durante
todo el metraje transitamos por distintas emociones, desde ese inicio místico,
hasta el más profundo drama, algunos toques de humor, amor y escenas
enormemente conmovedoras. Todo es un festín de emociones, un tránsito con un
ritmo pausado pero que nunca pierde. Y con una capacidad de asombro que
mantiene hasta el final.
Lo
particular y lo genial del filme, es que el alma en pena es regresada a este
cuerpo, y el nuevo habitante del cuerpo tiene que cargar con todos los
problemas del anterior. Lo que lo hace despreocuparse y mirar todo desde un
punto de vista diferente. Y en un momento decide seguir ignorando todo. Se
entera de que Makoto no tenía amigos, además de que dos de las cosas que
influyeron en su suicidio fue al enterarse de que la chica de la que estaba
enamorado era una prostituta, al seguirla a un hotel. Y luego en el mismo hotel
ve salir a su madre con su profesor de flamenco. Todos esos son golpes que no
puede resistir.
Me
gusta cómo se aborda este tema desde una visualización externa de la situación.
En una forma muy sutil. Me encantó su propuesta. Ese experimento en los cambios
de perspectiva de un mismo problema. Cuando los problemas aparentemente no son
tuyo, no le das importancia. Cuando piensas que los problemas no son tuyos, no
te interesan.
La
animación es excelente, sobre todo en ese efecto que logra en ocasiones
tratando de imitar un paisaje real. Además de la música, es una película de animación con mucha alma
y corazón, sincera y adulta.
Al
final, hay una sorpresa que no me gustaría desvelar a los que no la hayan
visto. Pero es un filme muy recomendable. Sin duda lo disfrutarán mucho.
8/10
No hay comentarios:
Publicar un comentario