Las Acacias, otra de las películas en la Competencia Oficial del FICCI. Era otra de las películas que me generaban expectativas, sobre todo luego de su triunfo en Cannes 2011 a la Mejor Ópera Prima (Cámara de Oro).
Giorgelli que dirige y escribe el guión, cuenta la sencilla historia de un camionero llamado Rubén, que lleva una carga de madera desde Asunción (Paraguay) hasta Buenos Aires (Argentina). Rubén es un hombre solitario y callado, que se encuentra muy alejado de su familia. En uno de sus viajes, el patrón le encarga que lleve a una mujer que además va con una niña en brazos, hasta Buenos Aires. Luego de ese largo viaje, se producirán cambios dentro de cada uno de los personajes.
Esta película me ha parecido preciosa. Escasean los diálogos y abundan los planos largos, pero están tan bien hilados y trabajados que cumplen muy bien el objetivo de trasmitir. Pero en esta tarea de “trasmitir”, hay que darle los créditos a ambos actores que están realmente muy bien, y la pequeña bebé, que como el mismo director dijo al final de la proyección: “fue un milagro haberla encontrado”. Una niña que trasmitiera tanto, que mirara fijamente y tuviera de forma natural los distintos gestos que realiza. Del trabajo del actor, mencionó que él ya es un actor reconocido de teatro, por lo que sus expresiones faciales están más que trabajadas, y lo hizo realmente bien. Y la mujer en cambio, mencionó que era inicialmente la asistente de casting, y al final de quedó con el papel, sin tener ninguna experiencia. Y afortunadamente lucía muy natural. Gracias a esas excelentes actuaciones, la película es realzada.
Además, acompañado con una muy buena dirección. Giorgelli sabe dónde poner la cámara, elaborar cuidadosamente y con precisión cada encuadre y cada plano. Y esos largos silencios que los actores se encargan de llenar con su presencia son ambientados solamente por el ruido del camión.
El final, también destacable y complaciente, pero Giorgelli añade el detalle de dejarlo abierto, abierto a todas las posibilidades. Si volverá o no volverá, sólo el espectador se encargará de plantearlo. Pero el mismo director mencionó que él tampoco lo sabía, que le gustaría que volviera, pero no lo sabía con certeza.
En síntesis, una película admirable, sencilla y minimalista pero por su tratamiento y sus interpretaciones es elevada de gran forma. Una joya.
7/10
No hay comentarios:
Publicar un comentario